El trueque es una modalidad de comercio que se ha usado durante toda la existencia del propio comercio. No importa los bienes a intercambiar siempre y cuando cada parte esté de acuerdo con ello. Actualmente, puedes encontrar muchos anuncios donde se comenta que se aceptan cambios, algo que se ha ido poniendo de moda poco a poco en España, lo que también ha llevado a la proliferación de páginas en internet donde el trueque es la base fundamental de su funcionamiento.
Todo esto comenzó a tener mucha popularidad por culpa, principalmente, de la crisis, que ha provocó falta de liquidez liquidez y sin poder cubrir necesidades como por ejemplo, conseguir una furgoneta para nuestra empresa o bien, el caso contrario, deshacernos de una furgoneta que no necesitamos y conseguir un coche que posiblemente, nos vendrá mejor. Pero el trueque facilita mucho estas cosas, ya que sin que exista mediación de dinero, podemos intercambiar precisamente, nuestra furgoneta por un coche o bien al contrario, nuestro coche por una furgoneta.
Habrá quien piense que un cambio furgoneta por coche no es rentable, pero nada más lejos de la realidad. Las furgonetas, sobre todo si son las de reparto por ciudad, normalmente basadas en turismos, tienen precios parecidos a los de cualquier otro coche e incluso en ocasiones más bajos. Esto hará que muchos pidan que se añada una cantidad de dinero para igualar, algo que habrá que tratar una vez se haya llegado a un acuerdo.
¿Por qué un cambio de furgoneta por coche?

Cambiar furgoneta por coche es una forma de dar salida a un al que no damos uso, por ejemplo, consiguiendo algo que necesitamos, en este caso una furgoneta. También puede ser y lo que queremos es dar salida a una furgoneta que no estamos usando o no queremos. Una forma de deshacernos de algo que no usamos y de conseguir algo que necesitamos de una forma super economica.
La idea del cambio furgoneta por coche es que podamos ahorrar pagando únicamente los impuestos imprescindibles, como es el 4% del valor venal del vehículo, establecido por la Agencia Tributaria (no te librarás nunca de este impuesto), aunque si estás dispuesto a añadir o recibir dinero para igualar el valor de ambos vehículos tendrás que dejarlo claro y negociarlo con el interesado en el trueque.
No obstante, el cambio furgoneta por coche es exactamente igual al cambio coche por coche, es decir una transacción donde a pesar de no haber dinero, interesa tener claro que se equipara a comprar un coche usado, con las mismas ventajas y los mismos inconvenientes como pueden ser averías y problemas ocultos, impago de multas o de impuestos y demás cosas. No dar carta blanca a estos temas, revisar bien que el vehículo cumpla todos los requisitos de circulación y esté en buen estado, es un trueque entre vehículos que deben funcionar correctamente.
Cambio de furgoneta por coche, ¿cómo hacerlo?
El cambio de furgoneta por coche no tiene misterio, ya que todo se hace como si fuera una compraventa de coches de segunda mano, es decir, el papeleo es el mismo. Debemos hacer un cambio de titularidad de los vehículos, hay que pagar tasas e impuestos y hay que firmar un contrato. La única diferencia es que no hay dinero de por medio, si no dos vehículos que se intercambian y que debe dejarse claro en el contrato.
Al igual que cuando compramos y vendemos un coche de segunda mano, hay que dejar constancia del cambio de furgoneta por coche mediante un contrato, donde deben figurar todos los datos de los dos interesados, las matrículas de los vehículos, la fecha y hora del cambio y los detalles que a cada parte le sean interesantes, como estado de los vehículos y la típica cláusula para no hacerse cargo de los posibles vicios ocultos. Si hay dinero de por medio porque una de las partes así lo ha solicitado, también debe reflejarse en el contrato.