Cómo llevar a un bebé en el coche

La familia es lo más grande que tiene una persona, ¿verdad? sobre todo cuando una pareja se convierte en papás. Es el momento más especial del mundo, nada se puede igualar a convertirse en padres y aún así, todavía hay quien no presta la suficiente atención. O mejor dicho, hay quien es padre casi de rebote con todo lo que ello conlleva. 

Si le preguntas a cualquier padre te dirá las cosas muy claras: cuando nace un bebé, acaba tu vida y empieza la suya. Quizá no sea tan drástico, pero sí es cierto que con un pequeño en casa, todo gira a su alrededor y muchas cosas cambian por obligación. Uno de los cambios más importantes, el que más notan sobre todo las mamás, es el cambio de horarios. Los más peques no entienden de horarios, ni de necesidades que no sean las suyas. 

No obstante, además de las necesidades del más pequeño, que no son pocas, los padres están obligados a cumplir una serie de obligaciones para el cuidado máximo del pequeño. Hay que comprar el cochecito para llevarle hasta que sepa andar, la cuna, los pañales, la comida especial para bebés, acudir al médico… y uno de los más importantes aunque mucha gente se lo tome muy a la ligera: su transporte en el coche. 

El coche es un lugar muy peligroso

Cómo llevar a un niño pequeño en el coche

Actualmente nos hemos acostumbrado a los coches de tal manera, que hemos perdido el respeto a esta máquina. Las calles están dominadas por los coches, el paisaje y las grandes ciudades se construyen de tal forma que los coches puedan circular libremente en detrimento de los peatones y las distancias entre pueblos o ciudades son un mar de asfalto diseñado para que los vehículos puedan desplazarse. Muchas cosas, más de las que parecen, giran en torno al coche. 

Los coches son máquinas que todo el mundo puede llevar con un mínimo de formación, a excepción de aquellos más potentes y rápidos, los cuales requieren de cierta experiencia y mente fría. Una gran parte de la población conduce diariamente y se ha vuelto algo normal, como el que camina por la calle dando un paseo y es ahí donde reside el error. Un coche es una máquina cuyo manejo implica un riesgo, desde el primer metro recorrido conducir conlleva riesgos y además, riesgos graves como accidentes mortales. 

Sí, el coche puede matar o mejor dicho, un manejo erróneo de un automóvil puede derivar en un accidente fatal para los ocupantes del coche y para terceras personas que muy posiblemente no tengan la culpa de nuestra poca coherencia. Cuando se maneja un vehículo hay que ser consciente de los problemas que puede ocurrir, de las consecuencias de esos problemas y de las secuelas que pueden quedar. Y no hablamos únicamente de temas físicos, también hay que sumar problemas económicos a la ecuación, por si tener una lesión no es suficiente motivo para tener las ideas claras. 

Llevar a un bebé con seguridad en el coche

Por eso, porque el coche es un riesgo, resulta absolutamente imprescindible prestar la máxima atención al transporte de nuestro bebé. Un recién nacido es una criatura extremadamente vulnerable y no solo porque sea incapaz de defenderse por sí mismo, si no porque fragilidad y las enormes posibilidades de sufrir lesiones de elevada gravedad. Par llevar a un niño pequeño hay que cumplir una serie de pasos que, además, están regulados por ley. 

Consecuencias de llevar al más pequeño de forma errónea

Cuando se piensa en tener familia, se deben tener muchas cosas en cuenta. La familia, como hemos dicho anteriormente, es lo mejor del mundo, pero también es una fuente de obligaciones y necesidades que se deben cumplir. Así, por tanto, antes de pensar en meter al más pequeño en el coche, conozcamos cuales son las necesidades del bebé dentro del vehículo. 

Lo primero que debemos saber es que nunca debemos llevar el niño en brazos, NUNCA. Seguro que lo has visto en televisión, a las típicas “famosas” saliendo del hospital con su bebé en brazos para meterse, tal cual, en el coche. Da la impresión que no tienen aprecio por el niño que acaban de dar a luz. Llevar al niño en brazos es lo más peligroso que se puede hacer, además de ser algo totalmente ilegal. Y vamos a contar porque es algo muy, pero que muy peligroso. 

Seguridad bebé en el coche

En caso de tener un accidente y llevar al niño en brazos, pueden ocurrir varias cosas. Una de ellas y cuya idea es aterradora, puede ser que el bebé se escape de nuestros brazos y que impacte contra el salpicadero o, el peor suceso posible, que atraviese el parabrisas con todo lo que ello conlleva. El parabrisas no es un vidrio normal, es un vidrio especial muy resistente diseñado para evitar que se desprendan trozos y se conviertan en cuchillas. Atravesarlo es algo realmente traumático por la fuerza necesaria, sería absolutamente fatal para el bebé, sin contar con las lesiones que sufrirá tras impactar con el coche y contra el suelo. Sin tener en cuenta que además, por si esto es poco, podría ser atropellado por el propio coche de donde ha salido despedido o por otro. 

Otra cosa que podría ocurrir en caso de llevar en brazos es que acabara aplastado por el peso de nuestro propio cuerpo. En un accidente nuestro cuerpo se convierte en un peso muerto, en un ariete que multiplica su peso exponencialmente y sería como poner encima del bebé varias toneladas. 

Estos son simples ejemplos, porque también podría ir el pequeño en los asientos delanteros e impactar con los traseros, salir despedido por una de las ventanas o bien, si lleva el cinturón sin un alzador, podría partirse en cuello porque el cinturón le sujeta a la altura del mismo convirtiéndose en una soga. Y no sirve de nada el decir “eso les pasa a otros, yo tengo cuidado”, quienes dicen eso son los que más posibilidades tienen de accidente. 

¿Cómo se ha de llevar al más pequeño en el coche?

Así hay que llevar al bebé en el coche

Los más pequeños de la casa requieren de accesorios específicos para poder viajar en un vehículo. Las famosas sillitas para bebés no son atrezzo, ni mucho menos, son sistemas de seguridad diseñados y desarrollados para proteger al bebé en caso de accidente. Son totalmente imprescindibles para la seguridad de nuestro hijo y su compra debe tener prioridad sobre cualquier otra cosa. Primero la seguridad del niño, luego el resto. 

De todas formas, antes de salir corriendo a comprar una silla, también hay que saber qué tipo de silla necesitamos. No sirve cualquier silla, hay una para cada momento y debemos ceñirnos a ello, la seguridad del bebé está en juego. 

Los primero a saber es que hasta los 15 meses o hasta que alcance los 10 kilos, el niño no podrá ir en dirección a la marcha, tiene que ir de espaldas. De esta forma se evitarán lesiones fatales en el cuello, lesiones que a cierta edad son menos graves porque los músculos del mismo van ganando fortaleza y son más capaces de resistir movimientos violentos. Tampoco debe ir ni muy erguido ni muy tumbado, un exceso de en ambos casos es fatal. Aún así, no te preocupes por estos temas, pues todas las sillas tienen un manual de instrucciones con consejos que se deben tener muy en cuenta. 

Bebé en el coche

Obligatoriamente los recién nacidos deben viajar en los asientos traseros, lugar donde todos los fabricantes instalan los anclajes ISOFIX, unos soportes donde se ancla la silla que salen directamente del chasis del vehículo. El lugar más seguro del asiento trasero es el centro, lo más alejado posible de las puertas, en caso de no existir anclaje ISOFIX en ese lugar, lo más acertado es colocarlo tras el asiento del copiloto en caso de viajar solo o detrás del conductor en caso de tener acompañante. 

Según vaya ganando peso y edad, tendremos que ir cambiando las sillas según las necesidades. Durante un tiempo tendrán que ser sillas según peso y luego según estatura, en cualquier tienda especializada o incluso en las páginas web de las marcas se puede encontrar toda la información necesaria sobre pesos y estatura. 

Antes de terminar, un par de consejos. Nunca se debe llevar al bebé en el asiento del copiloto si no existe la posibilidad de desactivar el airbag. De hecho, es mejor que el más pequeño de la casa no viaje nunca en los asientos delanteros hasta que tenga la edad mínima, que son 12 años y además, debe tener una estatura de al menos 1,35 metros, lo que antes ocurra.